La décima legislatura está llegando a su fin y la actual corporación municipal ya está preparada para la siguiente. “La resaca” de la, por momentos, “bronca” sesión plenaria del mes de febrero estuvo muy presente en el penúltimo “cara a cara” de la legislatura. Además, esta sesión no estuvo exenta de momentos polémicos, emotivos y anecdóticos.
Antes de adentrarse en el fervor de la “batalla dialéctica”, todos los representantes políticos de la corporación guardaron un respetuoso y emotivo minuto de silencio por un reciente caso de violencia de género. A diferencia de la anterior sesión, esta se celebró por la tarde-noche. Sin embargo, el punto común fue el masivo público que asistió al pleno, un buen ejemplo es que muchos de ellos lo tuvieron que presenciar de pie. Se colgó el cartel de “no hay billetes” como si de un evento deportivo se tratase y la verdad que tanta afluencia vecinal (muchos padres y madres con sus niños) escondía un profundo interés por una polémica futbolera entre los dos clubes del municipio: el Monnegre y el Mutxamel.
A las 19h el pleno dio el pistoletazo de salida. La sesión arrancó por los mismos cauces que la anterior y los primeros puntos enfrentados llegaron por cuestiones “religiosas”. Los das formaciones más escoradas a la izquierda, Guanyem y UEM-EUPV, cuestionaron la subvención a Cáritas Parroquial El Salvador 2019. Los “morados” se abstuvieron y la esquerraunista consideró que con “esta ayuda se creaba una duplicidad” y que se podría emplear mejor para otros problemas sociales. En la misma línea se mostraron sobre la aprobación de una subvención a la Comisión de Fiestas del Ravalet, la portavoz de UEM-EUPV, Alexia Puig, la rechazó y pidió que “redujese la cantidad”. Sin embargo, sí “lució músculo” para recordar que la aprobación del Protocolo de Duelo contra la Violencia de Género fue una propuesta de su partido.
El pleno empezó a coger ebullición dentro del área de servicios generales. El líder de Ciudadanos, Antonio Sola, entró en escena para manifestar la postura de su partido (abstención) acerca de la actualización de las tarifas municipales de la escuela infantil “El Ravel”. El portavoz naranja defendió que se pongan una serie de requisitos y puso de ejemplo “la gratuidad” que existe en otras escuelas infantiles de 2 a 3 años. Recordamos que el Ayuntamiento de Mutxamel está “atado de pies y manos” a este contrato durante más de 20 años. Borja Ivorra (Guanyem) pidió al equipo de gobierno que “revise” en profundidad estas actualizaciones. Desde el gobierno municipal, el alcalde Sebastián Cañadas dijo que “el contrato se puede revisar, pero que tiene ser entre las dos partes” y dejó entrever que si la escuela se opone, hay que seguir con las actualizaciones del contrato. No obstante, desde el PP indicaron que también se le está ayudando a otras escuelas municipales. Esta fue la votación más reñida: 14 votos a favor (PP, PSOE y Compromís), 4 en contra (Guayem, UEM y Gent d’Ací) y 3 abstenciones (Ciudadanos).
El debate más largo tuvo lugar con la modificación del programa de productividad por tiempo dedicado al solape en la Policía Local. La portavoz del PSOE, Loreto Martínez, y Sebastián Cañadas protagonizaron un intenso “cara a cara”. La portavoz socialista le reprochó al alcalde que hubiera reducido esas productividades mientras que el regidor popular se reafirmó que desde el primer instante que llegó al gobierno (2011), la Policía Local ha recuperado su poder retributivo. Además, Cañadas sacó a relucir la polémica e igualada votación de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) para mostrar su incredulidad a los partidos que la rechazaron y para criticar su cambio de criterio en este pleno (donde esta medida fue aprobada con 20 votos favorables y 1 abstención): “Hubo formaciones que se opusieron a dar trabajo a tres funcionarios”.
El PSOE y Ciudadanos salieron en tromba con estas rotundas palabras del alcalde: “La RPT era una modificación puntual, ésta engloba a todos los trabajadores”, matizaban los socialistas. “Esto ha sido avalado por todos los sindicatos, a diferencia de la RPT”, puntualizaban lo naranjas. Se siguió la misma tónica con otra modificación, esta vez con la del régimen retributivo por accidente de trabajo y permisos de maternidad, paternidad… Esta propuesta fue aprobada con la misma aritmética que la anterior (20-1) y en ella la edil popular Lara Llorca puso el acento en “los cambios de postura” de la oposición a lo largo de esta legislatura: “ Primero se abstuvieron a los acuerdos que presentamos en el área de personal, en el último pleno votaron en contra y ahora lo hacen a favor”. Además, el pleno nos dejó “reproches” entre el `portavoz de Compromís, Lluís Pastor, y el concejal de Hacienda, José Vicente Cuevas, por no haber aprobado los Presupuestos municipales desde el 2017.
Sin embargo, el momento más “subido de tono” llegó al final. Cuando los representantes de los clubes de fútbol Mutxamel (CF Monnegre y Mutxamel CF) tomaron la palabra se caldeó definitivamente el ambiente. ¿La causa? El reparto de las horas del campo de fútbol. El Mutxamel CF alegó que no se estaba respetando el acuerdo y que estaban siendo discriminados. Esto fue tajantemente rechazado por el Ayuntamiento y se comprometió a seguir trabajando para que los dos equipos lleguen a un entendimiento definitivo con el que se pueda resolver este problema. Estas explicaciones no convencieron a gran parte de los padres y algunos de ellos abandonaron el pleno muy enfadados. Debido a la “calentura” del momento, no extrañó, como hecho anecdótico, que se bajase constantemente la temperatura del aire acondicionado…