Debido a la gran demanda de puestos de venta no sedentaria de los sábados, y la falta de espacio en las calles donde está actualmente situado, se va a proceder a su traslado a la plaza de l’Ordana. Esta decisión viene motivada también por los estudios realizados por la policía local y servicios de emergencia que recomiendan el traslado, dado que por esas calles, con el mercado montado no puede circular una ambulancia o un camión de bomberos. El mercado de los sábados provoca un efecto dinamizador comercial para la economía local de nuestro municipio, volveremos a “ir a la plaza”.
Este cambio, supone un impulso a la economía local, ya que se va a poder conceder licencia de venta a más de 20 comerciantes que llevan más de 2 años en espera, por tanto, fomentará el empleo y habrá una mayor variedad de productos (textil, calzado, bisutería, ropa de bebe…) con lo que supone una mayor afluencia de público los sábados y repercutirá positivamente en todo el comercio de la zona, incentivando la apertura de nuevos comercios y reforzará el carácter comercial del eje Avda. de la rambla y calle del mercado.
Los estudios realizados por los técnicos municipales, todos favorables al cambio, coinciden en los siguientes aspectos: disminución de perjuicios a los vecinos de la zona tanto para el acceso a los vados así como a sus viviendas, mayor visibilidad de los comercios y hosteleros, aumento en la seguridad de consumidores y viandantes, mejora de la fluidez del tráfico, así como aumento de las plazas de estacionamiento.
Esta estrategia de sacar los mercadillos de las vías publicas se esta realizando también en otras localidades como Torrevieja con gran éxito y aceptación por parte de los usuarios.
Por experiencias anteriores, cualquier iniciativa que se realiza en esa plaza beneficia a los comerciantes de la zona, lo que se pretende es atraer clientes y por tanto potenciar el comercio local.