sábado , 19 octubre 2024

Una Cuaresma solidaria

Estamos de lleno en el tiempo de Pascua y no solo por lo que nos muestra el calendario sino porque el camino recorrido de la Cuaresma ha hecho posible renacer la esperanza y la vida para muchas personas.

Nuestra Parroquia de Mutxamel propuso para esta Cuaresma dos Acciones solidarias en favor de los más necesitados. La Limosna Penitencial y la Campaña de Caritas. Ambas se iniciaron el 17 de Febrero miércoles de Ceniza y finalizaron el Jueves Santo.

La limosna Penitencial es una propuesta para toda la Diócesis de la Delegación Diocesana de Acción Social y Caritativa cuyo Delegado diocesano es nuestro párroco D. Miguel Riquelme.

La clave de la campaña es educar y practicar una «limosna penitencial» organizada comunitariamente como un gesto de generosidad y de conversión que nace del encuentro con el Señor en la oración, y nos conduce a un nuevo encuentro con el Señor en el hermano que nos necesita

 

El lema de este año era: «Renuncia para compartir. La vacuna de la solidaridad»

Toda la aportación recibida ha ido destinada al Proyecto Veritas de Caritas Diocesana. Este proyecto acoge a personas en situación de exclusión social con problemas de salud. El Centro tiene capacidad para 14 plazas. El objetivo es acompañar de manera integral a las personas, posibilitando el acceso a sus derechos fundamentales, en los ámbitos de salud, psicológico, social y educativo.

Se trata de ofrecer oportunidades a quienes, por diversas circunstancias en su vida, han quedado al margen de la sociedad.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Campaña Caritas Parroquial

 

Un grupo de voluntarios de Caritas elaboraron unas cruces de madera con soporte de piedra y en cada una de ellas un cartel, arriba de la cruz, con las siete palabras de Cristo en el momento de su crucifixión.

Se realizaron 350 cruces, de forma manual por parte de este grupo de voluntarios, las cuales fueron colocadas en el Altar mayor de la Parroquia sobre un monte artificial, simulando el monte Calvario. Durante estos cuarenta días todos los que quisieron se acercaron a coger su cruz y depositar el donativo en favor de Cáritas. Esta Campaña finalizó el Jueves Santo, con la satisfacción de haber repartido todas las cruces. El broche final para este tiempo lo puso la Colecta de la misa del Jueves Santo que también fue dedicada a Caritas.

 

 

Queremos, dar las gracias a todo el pueblo por su colaboración, animando a la participación de todos en próximas campañas ya que la esencia de ser cristiano es nuestra solidaridad y generosidad con los pobres y necesitados, compartiendo con ellos todo aquello que tenemos y podemos.

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